El pasado jueves 7 de abril Random House publicó Eres hermosa (Beautiful You), la última novela de Chuck Palahniuk . Aunque siempre me ha gustado leer, he ido a rachas; meses de leer mucho y meses de no tocar un libro. Recuerdo que estaba en una de esas rachas en la que los libros simplemente estaban ahí, haciendo de estantería para apoyar los videojuegos, cuando un amigo me recomendó uno. Esto fue allá por el 2008, tras una conversación en la que empiezas hablando de algo banal y terminas hablando de pareja, relaciones, sentimientos (el amor y esas cosas), infidelidades y, cómo no, también de sexo. A día de hoy tengo claro que todo libro tiene su momento idóneo y que en muchas ocasiones pareciera que esos libros nos buscasen. El libro en cuestión era Asfixia (Choke, 2001). Así conocí a Palahniuk. Desde ese momento me declaré fan.
Una de las cosas que más me gustó (y me llamó la atención) fue el realismo con el que relataba cada detalle. La minuciosidad en la descripción de cualquier cosa y sobre todo el lenguaje utilizado para ello. Soez, malsonante, lleno de referencias escatológicas, tacos… en definitiva, satírico. Y claro, cuando ya me puse a leer todas sus obras y a informarme acerca del autor descubrí que no era algo casual en Asfixia, que toda la obra y el estilo de Chuck es éste: el realismo satírico. Y es que si algo hay que Palahniuk hace a la perfección es criticar, desde una perspectiva satírica, con humor, con mucha ironía, con un toque de sarcasmo, pero hace crítica de los grandes problemas en la sociedad actual: el estilo de vida que llevamos, el consumismo de masas, la fama, el dinero, las drogas, la prostitución, el poder, la política y un largo etcétera.
En cuestión de unos meses, leí todas las novelas de Palahniuk publicadas hasta ese momento, cuando la más reciente era Rant: La vida de un asesino. No me voy a extender hablando de qué trata cada libro y cuál es su mensaje, pero lo que sí diré es que justo esa novela, Rant, me dejó un poco (¿cómo decirlo?) desilusionado; y a partir de ahí no he vuelto a encontrarme con el Palahniuk de los orígenes. Sé que habrá quien piense que en sus primeras obras pudo haber sido un poco repetitivo con el tema del sexo y haberlo usado para crear morbo y polémica y que así se hablase más de ellas. Pero en realidad el tema del sexo sólo sale en dos. 
Recordemos que antes de Asfixia, Palahniuk ya había escrito El club de la lucha, Superviviente y su primera novela, Monstruos invisibles, la cual no le quisieron editar en un principio por considerarla demasiado desagradable e incómoda. Esto provocó que, queriendo ir aún más allá del límite impuesto, llevado por el despecho, escribiera El club de la lucha. Y, cosas curiosas, esta sí la publicaron. Sin grandes ventas ni buenas críticas, David Fincher decidió en 1999 llevarla al cine y, comercialmente hablando, también fue un fracaso. Pero sería el lanzamiento en DVD de la película y la fama de Brad Pitt lo que haría que se convirtiera en una película de culto, dándose a conocer entonces el nombre de Chuck Palahniuk, «el del libro de la peli». A partir de aquí y en ese mismo año le publicaron Monstruos invisibles y además Superviviente. Pero no fue hasta la publicación de Asfixia dos años más tarde que conseguiría la fama y el New York Times lo incluiría en la lista de superventas.
Un par de años después, en 2003, nos llegaba Nana. En esta ocasión aventuras, muertes súbitas de bebés, un periodista e investigaciones. Una gran novela y sin tocar el tema del sexo. Al año siguiente era Diario, una novela, el nuevo libro de Palahniuk que llenaba escaparates. En esta ocasión critica a la sociedad americana y a las mentiras que se esconden detrás del famoso «sueño americano» -de nuevo no hay sexo-. 
Hago hincapié en el tema del sexo porque mucha gente conoce a Palahniuk sólo por El club de la lucha o bien por ser el que escribe «siempre con el sexo de por medio para dar más que hablar» y esto no es así. Tan sólo año y medio después se publicaba Fantasmas. 
En esta novela Chuck reúne a un grupo de escritores en una mansión a la que van para descansar y dar rienda suelta a sus mentes y asi escribir sus grandes obras. Es en esta novela en la que encontramos Tripas o Reflexoputa, dos historias muy buenas, pero también es en esta novela en la que ya se me hacían predecibles las historias y veía falta de ganas por parte del autor. Y justo después llegó Rant, la vida de un asesino que como ya he mencionado fue la primera que me decepcionó o al menos desilusionó.
Hasta este momento siempre que salía nueva novela de Palahniuk estaba deseando leerla y ver hasta qué punto me sorprendía y me gustaba más aún, si era posible, que las anteriores. Ahora la cuestión era ver si, al menos, me gustaba y no me parecía predecible o incluso mala. Y he de decir que del mismo modo que sus cinco primeras novelas me parecen buenísimas, las cinco últimas me parecen sosas, predecibles e incluso, por momentos, aburridas y pesadas. Esto no significa que sean malas, ni mucho menos, pero no son tan buenas. 
En especial la historia de Madison Spencer, contada a lo largo de las dos últimas novelas Condenada, publicada en 2013 y Maldita publicada en 2015 que, aunque con ciertos pasajes divertidos y algún personaje más ameno, no me parece comparable a sus primeras obras. 
Eso sí, la crítica a la sociedad respecto al consumismo y en especial a cierta pareja del mundo del cine Hollywoodiense es brillante y devastadora.
En este momento, mientras escribo esto , me percato de que mis dos novelas favoritas son «las primeras»; la primera que escribió (Monstruos invisibles) y la primera que fue superventas y le hizo el hueco en el mercado de los grandes (Asfixia). Por supuesto esto no significa nada, simplemente es mi punto de vista respecto a la obra del autor. Espero que Eres hermosa vaya más en la linea de esas primeras novelas y volvamos a ver al Palahniuk con chispa, impredecible, con finales inesperados y con su sarcasmo y crítica habitual. Porque desde que empezó a sacar un libro por año aproximadamente Chuck Palahniuk no es el de sus orígenes. Y sí, en esta ocasión el sexo va a volver a tener un papel importante. Próximamente la reseña de Beautiful You.
LECTUREANDO 